Nuestra casa, la Tierra, nos necesita...no somos indiferentes...nos involucramos!!

Para pensar...

Generalmente, cuando se habla de la extinción de especies, se piensa únicamente en aquella flora y fauna que pertenecieron a la época prehistórica,  olvidando en muchos casos a las especies con los que contamos en la actualidad y que están en peligro de desaparición, por la intervención del hombre.

Asimismo, se tiende a pensar en el tigre que va y viene por su jaula y el oso polar que chapotea en su pequeño charco en el zoológico que quizá se conviertan pronto en los últimos representantes vivos de su especie, junto con otros favoritos del zoológico, como el orangután y el gorila, los tigres y los osos polares , sin atender que, junto a estos animales también se están extinguiendo :lechuzas, mulitas, teros,  cuises, etc,  fauna de nuestra zona (Villa María- Provincia de Córdoba) como también numerosas especies vegetales autóctonas.

En la actualidad, existen algunas personas que se han preocupado por la extinción de animales y vegetales y han formado criaderos para preservar algunas especies o invernaderos para el cultivo de plantas autóctonas, propiciando la forestación.

La tala indiscriminada de árboles para recuperar tierras para el cultivo de soja, por ejemplo, en nuestra zona, ha traído consigo la desaparición de numerosas especies de arbustos y árboles, que no sólo oxigenaban el aire sino que eran el albergue de numerosas especies animales: calandrias, horneros, tijeretas,etc.

En los últimos años, el índice de extinción se ha acelerado a causa de las actividades desarrolladas por el hombre. A diferencia de otros animales que elaboran en su propio organismo las adaptaciones que necesitan para sobrevivir, los seres humanos pueden transformar acentuadamente el ambiente para adecuarlo a ellos. Aunque algunos animales, como los castores, pueden introducir cambios éstos son relativamente limitados.
Se considera que el hombre prehistórico ha sido causa de la extinción de algunas especies de los mayores mamíferos que existían entonces.

 Hoy, el tráfico de la flora y la fauna se ha convertido en uno de los emprendimientos económicos más redituables y figura en el mundo en tercer lugar luego del de armas y de las drogas. El de la fauna mueve alrededor de 10.000 millones de dólares anuales y la flora, está superando los 7.000 millones.

  A causa de este comercio ilegal, unas 700 especies se encuentran al borde de la extinción. Pero, además, otras 2.300 especies animales y 24.000 vegetales están amenazadas.
¿No te parece que llegó la hora de que hagamos algo?